DERECHO COLABORATIVO
Mediación Extrajudicial
Una nueva forma de entender la práctica de la abogacía que se ajusta a las necesidades del cliente, ya no sólo dando respuestas desde la perspectiva jurídica, sino atendiendo a todos los aspectos que subyacen en el conflicto.
¿Qué es la mediación extrajudicial?
Es la forma idónea de resolución de conflictos para aquellas personas que buscan un plus en su abogado, que desean resolver sus problemas de manera consensuada, responsable y tratando de conservar las relaciones, pero sin renunciar a la defensa de sus intereses por parte de su abogado de confianza. Es una fórmula ideal para los conflictos empresariales y familiares, ámbitos en donde las relaciones entre las partes y la confidencialidad son claves.
Ventajas de la mediación
- Evita litigios largos y costosos
- Soluciones personalizadas y consensuadas
- Proceso ágil y flexible
- Confidencialidad garantizada
- Favorece la comunicación y la relación futura entre las partes
Un equipo experto a tu servicio
Protección legal para familias y personas vulnerables
La práctica colaborativa es un proceso voluntario, debiendo de estar todas las partes de acuerdo en solucionar sus disputas con la intervención de sus respectivos abogados, que deberán de estar debidamente formados en Derecho Colaborativo, y que se comprometerán por escrito a no acudir a los tribunales.
El compromiso de los abogados colaborativos de resolver los problemas de sus clientes a través del acuerdo es absoluto, la confidencialidad está garantizada y, en función de los asuntos a negociar, se podrán valer de otros profesionales (asesores financieros, psicólogos, mediadores, ingenieros, arquitectos, etc.), preferentemente formados en prácticas colaborativas: la práctica colaborativa abarca todos los intereses de las partes, dando una solución integral a los conflictos.
Arbitraje
El arbitraje es un mecanismo alternativo de solución de controversias regulado legalmente en el que las partes, voluntariamente, deciden someterse a la solución dada por un árbitro elegido de común acuerdo, renunciando así a acudir a los Tribunales. Las partes pueden elegir la sede del arbitraje, las reglas del procedimiento, el derecho aplicable y el idioma. La resolución del árbitro (laudo) goza de la misma eficacia que una Sentencia. Es una fórmula más rápida, flexible e ideal para los conflictos mercantiles y comerciales, de gran adaptación a la diversidad actual de los negocios, para las controversias derivadas de la contratación y, muy especialmente, en las de ámbito internacional como la contratación de productos o servicios.